Cada año, se invierten innumerables horas y se pierden numerosos recursos debido a código mal escrito, ralentizando el desarrollo, disminuyendo la productividad, generando graves fallos e incluso pudiendo acabar con la organización o empresa.
El reconocido experto de software Robert C. Martin, junto con sus colegas de Object Mentor, nos presentan sus óptimas técnicas y metodologías ágiles para limpiar el código sobre la marcha y crearlo de forma correcta, de este modo mejorará como programador.
Pero la arquitectura es sólo una metáfora del desarrollo de software y en concreto de la parte del software que ofrece el producto inicial, de la misma forma que un arquitecto entrega un edificio inmaculado. Hoy en día, el objetivo es comercializar rápidamente los productos.
Queremos que las fábricas produzcan software a pleno rendimiento. Se trata de fábricas humanas, programadores que piensan, que sienten y que trabajan para crear un producto. La metáfora de la manufacturación es incluso más evidente en este pensamiento. Los aspectos productivos de las fábricas de automóviles japonesas fueron una gran inspiración para Serum.